domingo, 6 de marzo de 2011

Fernando Cabrera, Tranquicardia


Auténtico embajador de la cultura charrúa, a poco de editar “Canciones Propias” (su más reciente disco en el que versiona 16 temas fundamentales de la canción uruguaya), Fernando Cabrera dialogó con América Late.

En general, las notas acerca de músicos u otros artistas conocidos arrancan subrayando los últimos logros, ya fueren nuevos discos, recitales o premios. Fernando Cabrera no se merece que empecemos así, resaltando nada del final, porque su carrera ha sido larga y pareja, y es un ícono de la música uruguaya desde que todos tenemos memoria. Él, paradójicamente, tiene problemas de memoria. “Me falta el hemisferio donde estaba la memoria, que perdí al igual que otros funcionamientos cerebrales. Habrás notado que tengo un hombro un poco caído. Creo que en mi casa tuvieron la idea de mandarme a estudiar guitarra cuando era niño, muy chico. La profesora me enseñaba canciones argentinas, ella era argentina”, recuerda, pese a su propia advertencia.

“Mi música recibe alguna influencia fuerte de alguna banda y algunos géneros internacionales. También -y no sabría cómo explicártelo ni explicármelo- es puramente uruguaya”, apunta Cabrera. Y aunque no lo explique, se entiende. Eso sí: para caer en la cuenta de lo que está diciendo el músico cuando dice “puramente uruguaya”, hay que tomarse un tiempo para escuchar sus canciones. Se desprende, entre los acordes y los versos de su El tiempo está después, por ejemplo, una esencia irreproducible por otros cerebros del mundo; intrasmisible a otras culturas distintas a la uruguaya.

En noviembre de 2010 la discográfica Ayuí editó su más reciente disco, Canciones Propias, en el cual Cabrera versiona 16 temas de autores fundamentales de la canción uruguaya. El año pasado participó también en la realización de la banda sonora de Jamás leí a Onetti, el documental de Pablo Dotta sobre el escritor uruguayo, y en otra banda sonora para una exposición de Óscar Larroca.

¿En qué te inspirás, en general, para transmitir cosas tan particulares de la esencia uruguaya?
Es imposible manejar la inspiración, llega y se va cuando ella quiere, como un ataque. Cuando llega, me deja una frase, un título, una idea vaga a desarrollar, una pequeña melodía que no alcanza para nada, y desaparece. Entonces tengo que ponerme a trabajar como loco para tratar de convertir aquello en algo aceptable. La inspiración ya voló de vuelta a la nada, donde jamás la puedo ubicar cuando yo quiero, cuando yo la preciso.

¿Vas a participar de alguna manera en el Carnaval? ¿Te interesa el Carnaval uruguayo?
No, no voy a participar de ninguna manera, aunque me tira mucho “El Gramillero”, uno de los tres personajes históricos de las comparsas de candombe. Se trata de un viejo tembleque, curandero, de barbas blancas, que lleva en un maletín de médico todo tipo de hierbas curativas; su baile es epiléptico. El carnaval uruguayo me interesa mucho y me enorgullece, puesto que es arte puro en manos del pueblo.

¿En qué otros lugares del mundo has trabajado o brindado recitales?
En Argentina, Brasil, Bolivia, Perú, Paraguay, México, Costa Rica, Bélgica, Andorra, Inglaterra, España, Francia y Rusia. Casualmente, todas calles de Montevideo.

¿Por qué los músicos uruguayos, teniendo el talento y la calidad que tienen, no son más conocidos afuera?
Porque somos muy friolentos. Yo además tengo tranquicardia. Pero guarda que algunos como el negro Rada o Jorge Drexler o Daniel Viglietti o el trío Fattoruso -y no sigo para no contradecir tu pregunta- son muy conocidos en muchas partes.

http://www.americalate.com

1 comentario:

Martín R dijo...

Buenas, queria agradecer toda la info y la dedidación que le pones a tu blog, soy un seguidor más de Fernando. Siempre me paseo por estos lados pero hasta ahora no habia dejado un comentario. Salu2 desde lo profundo de mi imaginario universo

y Gracias nuevamente!